Pulti: “El Reino Unido actúa a su antojo en Malvinas y en nuestro mar, pero Milei guarda silencio”

El diputado provincial Pulti ha presentado un proyecto en la Cámara de Diputados provincial para expresar su enérgico repudio a la decisión unilateral y no consultada del Reino Unido de avanzar en la exploración y explotación offshore de petróleo en aguas del Atlántico Sur. Pulti denuncia además la inacción inexplicable del Ministerio de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto.

“Desde febrero a julio se han sucedido tres decisiones que atentan contra nuestra soberanía: primero, la restricción marítima de 166.000 kilómetros; luego, la construcción de un puerto en Malvinas con miras a la Antártida; y ahora, la exploración offshore,” señaló Pulti. “En cinco meses, han avasallado la soberanía argentina en tres ocasiones.”

Pulti recordó que esta conducta ilegítima no es nueva. “Se remonta a 2010, cuando la ocupación británica abrió un proceso de licitación para la búsqueda de hidrocarburos en los mares circundantes a las Islas Malvinas. El yacimiento identificado, calificado como de clase mundial, cuenta con reservas comprobables de 580 millones de barriles de petróleo,” comentó. “La compañía que ganó la licitación afirmó que el hallazgo podría transformar las islas en una nueva provincia productora de hidrocarburos,” añadió.

Recientemente, el Consejo Consultivo de las Islas Malvinas lanzó una consulta pública sobre la “Declaración de Impacto Medioambiental EIS” del yacimiento de petróleo Sea Lion, ubicado en el Área de Desarrollo del norte de las Islas Malvinas. La consulta, que se llevará a cabo del 24 de junio al 5 de agosto, aborda la decisión de proceder con la explotación de estos recursos naturales no renovables, pese a estar sujetos a disputa de soberanía.

Pulti subrayó que “el yacimiento Sea Lion está situado a 300 kilómetros al norte de las Islas Malvinas, implicando la perforación de 23 pozos petroleros y la producción de más de 300 millones de barriles de petróleo durante 30 años.” Concluyó señalando que “el silencio y la inacción de la Cancillería son una violación de las leyes y la constitución nacional. No podemos permitir que el gobierno británico siga explotando los recursos de las Islas Malvinas y los mares circundantes, territorios que son soberanos argentinos.”