¿Bar o profanación? Neme defiende su polémico proyecto en el Faro de la Memoria

El concejal del PRO, Agustín Neme, ha defendido fervientemente la aprobación de un proyecto que habilitaría un bar de gin en el ex centro clandestino de detención ESIM. Neme criticó duramente a quienes se oponen a la iniciativa, acusándolos de generar una discusión “ridícula” y estar alejados de la realidad. Según el edil, en la misma zona ya existen emprendimientos privados y canchas de hockey instaladas por el kirchnerismo sin que nadie haya levantado una voz en contra.

El Concejo Deliberante recientemente avanzó en una ordenanza para ceder un terreno cercano al Faro de la Memoria a una sociedad de fomento barrial, con el objetivo de revitalizar el área y abrir un bar de gin. Neme argumenta que este tipo de iniciativas público-privadas son fundamentales para generar nuevos puestos de trabajo tanto en la construcción como en la operación del bar, algo que, según él, es constantemente obstaculizado por la oposición.

El proyecto también incluye la instalación de una destilería de gin, una propuesta que ha sido recibida con rechazo por parte del kirchnerismo, Frente Renovador y Acción Marplatense. Neme, en sus declaraciones, atacó a sus detractores, acusándolos de oponerse a cualquier forma de producción y de utilizar los derechos humanos como herramienta política.

Para el concejal, el terreno en cuestión no tiene relación directa con los derechos humanos y se encuentra distanciado del Faro de la Memoria. “Buscamos recuperar un espacio abandonado y mejorar la zona para que pueda ser disfrutada por todos”, afirmó Neme, reiterando que las críticas de los organismos de derechos humanos y sectores de la oposición son infundadas y autoritarias.

El concejal no escatimó en acusaciones contra sus adversarios, tildándolos de “abanderados de la ciudad del no” y defendiendo su visión de una “ciudad del sí”, donde el estado y el sector privado colaboran para generar oportunidades laborales y mejorar los espacios públicos. “Defender los derechos humanos no debe ser una moneda de cambio política”, concluyó Neme, resaltando que su propuesta también beneficiará al Faro de la Memoria y a la comunidad en general.