En un reciente tweet, el presidente Javier Milei comentó sobre la marcha universitaria, criticando a aquellos que, según él, utilizan causas nobles para promover sus propios intereses. Milei sostuvo que el gobierno nacional nunca insinuó la intención de cerrar las universidades nacionales y que, de hecho, ya se habían realizado los giros de recursos para los gastos de funcionamiento de todas las universidades nacionales antes de la manifestación.
Milei acusó a la clase política de montar un acto político de oposición al gobierno bajo una consigna justa. Nombró a Massa, Cristina, Lousteau, Yacobitti, la CGT, la CTA, el radicalismo cómplice y todos los demás actores de la clase política que se oponen a cualquier cambio porque han sido los principales beneficiarios del antiguo régimen.
Según Milei, estos actores no defienden la educación, sino sus propios privilegios, y utilizan a la sociedad para hacerlo. Citó ejemplos de Aerolíneas, los jubilados cuando se robaron los fondos de las AFJP, YPF y la obra pública.
Milei concluyó su tweet afirmando que la mayoría de los argentinos eligieron un presidente para terminar con los privilegios de los políticos. Prometió garantizar los fondos para el funcionamiento de las universidades y auditar cómo se utilizan esos fondos, argumentando que ese dinero surge del esfuerzo de la mayoría de los argentinos que viven debajo de la línea de la pobreza y no debe ser utilizado para engordar los bolsillos de algunos que han hecho un negocio de la educación pública.
Finalmente, Milei reafirmó su convicción de que está dando las batallas para las que fue elegido por la mayoría de los argentinos, y concluyó con un enérgico “¡Viva la libertad, carajo!”.