La expresidenta Cristina Fernández de Kirchner ha reaparecido en la escena política con un mensaje grabado para la militancia de Nuevo Encuentro, un espacio que realizó un plenario con todos sus referentes. En su mensaje, Fernández de Kirchner criticó duramente al Gobierno de Javier Milei y describió un cuadro de situación grave en el país.
“El cuadro se agrava cada vez más”, expresó la expresidenta en sus primeras palabras. La referente de Unión por la Patria (UP) hizo hincapié en la necesidad de abordar y profundizar la situación del país, y aseguró que es imprescindible destinar parte del encuentro a la discusión y organización de la fuerza.
Fernández de Kirchner no se limitó a criticar las políticas de Milei, sino que también analizó cuáles deben ser las próximas medidas por parte de la oposición. En particular, hizo alusión a la cuestión del precio de los servicios públicos esenciales y al aumento de las tarifas.
“El aumento de las tarifas, que en realidad debe implicar, ni más ni menos que discutir o rediscutir la cuestión energética y su marco regulatorio en Argentina, significarán sin lugar a duda un punto de inflexión en los tiempos que vienen”, concluyó la expresidenta. Con estas palabras, Fernández de Kirchner dejó claro que la situación del país requiere de un análisis profundo y de medidas concretas por parte de la oposición.
Además, la expresidenta señaló que “Deuda externa y energía deben ser dos vectores que se entrecrucen en la construcción de una Argentina diferente”, y criticó el modelo propuesto desde un dogmatismo e ideologismo incomprensible. Fernández de Kirchner abogó por una oposición basada en la comprobación empírica del fracaso de estas políticas, que no son nuevas, ni mucho menos originales.
“Experiencia que, bueno es decirlo y aclararlo también, nos debe obligar a nosotros a analizar lo hecho y repensar estrategia y políticas en términos de presente y de futuro”, agregó la expresidenta. Con la convicción de siempre, y con la plena confianza de que en los espacios de discusión del movimiento nacional, popular y democrático, se podrá no solo interpretar la historia, sino también resignificarla para volver a representar.