“El ministro Russo está aterrado, el cargo le queda grande”, afirmó con firmeza Malena Galmarini, ex presidenta de AySA, sobre Mario Russo, quien trabajó bajo su dirección durante tres años. Galmarini no se contuvo al criticar duramente a Russo, actual ministro de Salud de la Nación, durante su aparición en el canal C5N. “Russo está paralizado por el miedo, el cargo le supera”, sentenció.
Galmarini desafió a Russo a denunciar las presiones que, según él, el Gobierno está recibiendo de los laboratorios. “Si dice que los laboratorios están presionando al Gobierno, que vaya y lo denuncie. Espero que mañana [por hoy] el ministro lo diga en la Justicia”, exigió la ex precandidata a intendenta de Tigre. Galmarini reveló que había hablado con Russo antes de que asumiera como ministro del Gobierno de Javier Milei. “Le aconsejé que no aceptara el cargo de ministro”, confesó, y añadió: “No puedo decirle nada a una persona que milita en La Libertad Avanza (LLA). Eso es un límite para mí”.
Galmarini aseguró que conoce bien a Russo. “Fue director de AySA durante tres años mientras yo estaba al frente. Además, era secretario de Salud en San Miguel cuando Joaquín De la Torre todavía era intendente peronista”, recordó, refiriéndose a la época en que De la Torre formaba parte del FR, entre 2013 y 2016, año en que se unió al gobierno bonaerense de María Eugenia Vidal como ministro de Gobierno.
“Algunas de las cosas que dice Russo me sorprenden. Juntos vivimos la pandemia de Covid. Nos apoyamos mutuamente durante la pandemia de gripe A y el brote anterior de dengue. Si hay algo en lo que estábamos de acuerdo era que cuando hubiera vacunas había que vacunar”, subrayó Galmarini, en referencia a la postura del Gobierno, que ha cuestionado la eficacia de la vacuna y ha afirmado que no se la administrará a la población.
La ex funcionaria del gobierno de Alberto Fernández aseguró que “hay dos inventos de la primera mitad del siglo anterior que cambiaron la expectativa de vida de los seres humanos: el agua potable y las vacunas”. Y destacó la importancia de implementar programas de inmunización para la población.
Galmarini intercambió elogios con el ex secretario de Comercio y ex precandidato presidencial Guillermo Moreno, quien desde el principio alabó los modales peronistas de Galmarini. Sin embargo, tuvieron un claro punto de desacuerdo.
“No confío demasiado en las encuestas. Veo que el presidente Milei ha bajado un poco en las encuestas, pero también creo que si nosotros no hacemos autocrítica, revertimos las políticas públicas y reinventamos al peronismo para darle no solo mística, amor y épica, sino básicamente soluciones para la gente, entonces la gente dirá ‘Milei no me gusta, se da la vuelta y dice tampoco’”, afirmó, y puntualizó: “Tenemos cuatro o tres años por delante” en referencia a las próximas elecciones presidenciales de 2027.
Fue entonces cuando Moreno marcó un contrapunto: “Quería desmitificar esto de la alta imagen. En 100 días él [Milei] pasó de tener un 68,7% de imagen positiva a un 44%. Perdió un 24%. Si en los próximos 100 días pierde otro 24%, tendrá que irse”, afirmó el político, que fue inmediatamente interrumpido por Galmarini, quien decía “no, no, no, compañero, no”. “La Asamblea Legislativa es constitucional”, justificó Moreno. “El general [Juan Domingo Perón] también decía que entre el tiempo y la sangre, era mejor el tiempo, compañero. Estamos entrando en un terreno que no me gusta”, señaló la dirigente del FR.
“Cuarenta años de democracia todavía es muy poco. Hemos vivido muchas interrupciones democráticas. No estamos en condiciones de empujar a nadie al abismo”, remarcó Galmarini y agregó: “En todo caso, lo que hay que hacer es acompañar a la gente y dentro de un año, un año y pico, cuando lleguen las elecciones, mostrarles, hacerles entender a la gente que podemos ser mucho mejores de lo que hemos sido este último tiempo porque si además LLA tiene más diputados y senadores, la ley ómnibus y el DNU que están arruinando la vida cotidiana de la gente van a pasar”.
Massa, detrás de la cámara, y Victoria Villarruel “Es cierto que la Asamblea Legislativa es constitucional”, afirmó Galmarini, “pero también es cierto que no hay ley de acefalía porque hay una vicepresidenta [en ejercicio] y tanto la vicepresidenta [Victoria Villarruel] como Milei me asustan”, sostuvo la ex presidenta de AySA, ante la mirada de Massa, quien era enfocado por la cámara y quien se llevó las manos a la cara cuando Moreno pidió que Milei se fuera del gobierno. “La vicepresidenta de los 56% que sacó Milei, ¿cuánto será de ella, medio punto, tres votos, diez? No tiene legitimidad política”, afirmaba Moreno ante la incómoda mirada de Massa.
“Nosotros perdimos la elección hace 120 días. Por lo tanto, tenemos que respetar a la gente que eligió otra cosa, que tiene derecho a elegir otra cosa y en todo caso hay que acompañarla. Si la gente sale a la calle y pide masivamente que cambie el Gobierno, habrá todas las herramientas constitucionales que tenemos. Mientras tanto, no hay que empujar a la gente”, apuntó Galmarini ante un Massa que asentía con la cabeza.
El conductor del programa, Pablo Duggan, le pidió al ex ministro que entrara a saludar, pero Massa se negó y Galmarini se quejó por la intención del conductor. “¿Me invitaron a mí o lo invitaron a él? ¿Soy la mujer o una dirigente política?”, preguntó con fastidio Galmarini. La producción le alcanzó un micrófono a Massa, quien solo atinó a decir que había ido en su papel de marido a buscar a su esposa y todavía no rompió el silencio que se autoimpuso desde la derrota en el balotaje frente a Milei el pasado 19 de noviembre de 2023.